domingo, 28 de noviembre de 2010
"Yo como agente" "Yo como objeto" y "Yo como experiencia"
Una vez un amigo mio me dijo..." Yo soy mi cuerpo ".
Me quedé un rato pensando...pero hombre, si digo que yo soy mi...lo que sea, yo tendré que ser ese "alguien" que posee ese cuerpo, por ejemplo el que echando un vistazo a mi cuerpo exclama:
" Éste no es el cuerpo que a mi me gustaría tener ".
Entonces eché un vistazo a mis emociones... ¿seré yo eso? ¿mis emociones?
Y pensé..."No puede ser" yo debo ser quien está ya harto de sentirse a veces como se siente, quienquiera que sea yo, ese yo es alguien que quiere sentirse mejor".
Veamos ¿y mis capacidades mentales? ¿mi inteligencia? ¿seré yo las capacides cognitivas que tenga? ¿lo que me hace pensar?
No, definitivamente no, he sufrido demasiado con mis limitaciones. En todo caso debo ser quien quisiera ser más capaz, más perspicaz. Además esas capacidades es algo que yo poseo, así que yo tendré que ser el dueño de todas estas características o atributos que me están dando más dolores de cabeza que otra cosa.
Como diría Eugenio D´ors, yo sería una potencia contra una fatalidad que se le resiste (Religio est Libertas, 1925)
Así que muy en el fondo yo soy, sobre todo, quien padece todas estas imperfecciones. Soy un deseo infinito de amor, poder y libertad; y todo junto, por muy incompatible que pudiera parecer, "alguien" para quien todas esas cosas que he mencionado al principio (físico, emociones, inteligencia etc.) no serian más que limitaciones.
Ahora estamos hablando del "Yo como agente", el cual sería todo lo mencionado más arriba, las capacidades, identidad, historia, propiedades y atributos psicológicos y físicos, todo lo cual seria insuficiente para aplacar la sed de infinitud, de libertad, amor y poder absolutos.
Este es el "Yo como agente", un yo no podría ser percibido directamente sino solamente a través de sus capacidades.
Extendiendonos un poco más en el concepto de "Yo como objeto", yo soy alguien que se llama como se llama y tiene una historia. Es la memoria de mi mismo, de mi cuerpo a lo largo del tiempo y mis experiencias pasadas.
Entonces...yo soy esto último también, el "Yo como objeto", el autoconcepto y autoimagen. Sí, como objeto, ya que en el fondo este "yo" son estructuras de conocimiento, el cuerpo, capacidades, creencias, insertado todo ello en el cerebro, parte en la corteza cerebral que representa el esquema corporal y parte en la memoria que se aloja primeramente en las profundidades del cerebro, en el hipocampo, y en el neocórtex después.
El "Yo como objeto" vendria a ser la actualización de todo nuestro pasado, biológico y psicológico, en el presente.
Pero tambien soy un "yo experiencial", el "Yo como experiencia", justo este ente que está escribiendo; que es consciente en este mismo momento; que ve la pantalla y las letras correr mientras escribe; que siente como siente en el momento presente, que lo recorre como un surfista que no tiene en este mundo otra cosa más que la tabla y la ola que le arrastra, olvidado de sí mismo y de su historia, momento cumbre que nos conecta con el ahora mismo. Soy los colores y formas que inundan mi visión, mi vista. Los sonidos que escucho, cercanos y lejanos, mi propio peso, aquello que perciba en este momento de mi propio cuerpo, y un recuerdo...un recuerdo...un recuerdo...
Abandono inconscientemente mi yo experiencial (Yo como experiencia) y un nuevo personaje surje en escena. El peso del pasado, mi "Yo como objeto" y el sufrimiento; sufrimiento de no ser lo que deseo; el "Yo como agente", ese ente incognoscible...
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