lunes, 30 de julio de 2012
La raiz del sentimiento de soledad
Nos amamos a nosotros mismos con delirio; por eso queremos ser como esa persona tan maravillosa; y a la vez nos odiamos despiadadamente por que, evidentemente, no podemos ser ella.
¿Solución? tenerla siempre a nuestra lado, pero... ¡oh desdicha!, eso no puede ser.
He aquí la mayor tragedia humana; la mayor miseria emocional.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
8 comentarios:
En realidad, yo suelo despreciarme.
Es el sentimiento mas comùn, para mi.
Un abrazo.
Pues no me parece justo que nos despreciemos.
Descartemos o intentemos eliminar a ese personajillo que llevamos dentro que se dedica a emitir juicios de valor sobre nosotros mismos.
Un abrazo
Tienes toda la razón nada es para siempre, pero hay temporadas que parece que no acaban nunca...Soy como todos unos días me amo con locura y otros me desprecio....
Besos
Ya lo descubrió buda, NVBallesteros, la impermanencia...
Un beso
No se, en que punto de este estado emocional nace la envidia, pero creo que es ella, la que nos hace querer vivir lo que no somos.
Me ha gustado tu blog.
un fuerte saludo
fus
Sí, fus, yo también creo que la envidia tiene que ver en eso muchas veces; yo lo he enfocado desde el punto de vista de hacerse con una identidad ideal.
Un cordial saludo
Hay que quererse lo suficiente para mejorar cada día. quererse con humildad, para cambiarnos y ser mejores, pensando en el otro. Un abrazo.
Gracias por su comentario, Alma Mateos Taborda.
Un abrazo
Publicar un comentario